El Palacio Consistorial de Cartagena, o Ayuntamiento de Cartagena, es una joya arquitectónica para los habitantes de la Región.
Anteriormente era una pequeña casa consistorial, pero a comienzos del siglo XX sufre un cambio de gran magnitud, pasando a ser un edificio más colosal. Luego de la transformación arquitectónica del edificio, su calidad estética aumento, siendo atractivo a la vista de quienes circulaban por sus alrededores.
A pesar de su belleza estética, que iba con los estilos más dominantes de la época, no se percataron de su diseño estructural, pues, con el paso del tiempo, los cimientos del palacio comenzaron a fallar.
Inicialmente se trataba de cimientos hechos con madera, específicamente pilotes, los cuales no fueron aptos para las condiciones del terreno, que por su inestabilidad, llevaron al deterioro progresivo de la estructura en general.
Fueron entonces, las principales causas de este desastre, las siguientes:
- Construcción de la estructura sobre suelos inestables: pues los suelos sobre los que se levanta el edificio, son terrenos ganados al mar.
- La no intervención del edificio tras una serie de movimientos en cadena que dañaron la estructura del mismo.
- Utilización de madera como material estructural en un suelo con tales propiedades.
Enormes fueron los problemas que se desencadenaron posteriormente a su inauguración en el año 1907, pues luego de los movimientos de la edificación, se comenzó a agrietar la estructura, abriendo grandes agujeros y creando divisiones en elementos como las cubiertas, en un principio.
El problema siguió agravándose hasta llegar a otros elementos como las losas, muros, pavimentos, mármoles, y otros más, razón por la cual tuvo que ser rehabilitado muchísimos años más adelante.
El proceso de rehabilitación y restauración fue directamente orientado a la solución de la estructura, pues aquí estaba su principal problema, y fue llevado en diversas etapas durante un extenso periodo que abarco casi diez años.
En el año 1995, comienza entonces el proceso que fue llevado a cabo de la siguiente manera:
- Primera Etapa o Fase 1: la primera etapa del proceso de restauración vino dada por la intervención de los pilotes, que al ser de madera, no eran lo suficientemente estables y resistentes a los movimientos y cargas transmitidas por el inestable terreno de fundación. Al ver esto, fue inyectado hormigón bajo el edificio, como forma de reforzar los pilotes en este edificio de Murcia.
- Segunda Etapa o Fase 2: en la que se procedió a la restauración y refuerzo de la estructura sobre tierra. Fueron demolidas muchas partes y elementos de la obra, para poder ser sustituidos por otros nuevos, entre ellos, escayolas, pavimentos, carpinterías y zócalos. Las piezas desmontadas fueron puestas en manos de expertos, de grandes maestros artesanos y especialistas en la realización de las mismas, para que el trabajo fuese profesional y quedara igual al original, elementos como la cristalerías, lámparas, escayolas, maderas y mármoles fueron puestas en sus manos para ser restauradas o reelaboradas.
Lo importante es entender como este palacio fue restaurado y traído de vuelta a su mejor momento, y que gracias a sus nuevos pilotes, Murcia puede ahora disfrutar de esta maravilla arquitectónica, y de su valiosa e importante participación en la historia de la ciudad. Muchas edificaciones son restauradas en Murcia, y en toda España los casos de recalce de pilotes, restauración de pilotes e instalación de nuevas cimentaciones suele ser habitual.
Murcia tiene ya su palacio intacto y de pie para todos aquellos que quieran conocer su arquitectura, y la historia de cómo sus pilotes y su estructura, fue recuperada por expertos que a pesar de no haber estado presentes en aquella época, pudieron materializar este estilo arquitectónico, de la manera más exacta y perfecta posible.
